VIA VERDE DEL PLAZAOLA

DE LEKUNBERRI A LA PRESA DE MUGIRO

 

A 2 horas del centro de Bilbao por A-625 / A-1 (141 Km) (Sin peaje)

A 1 hora 30 minutos del centro de Bilbao por A-8 (148 Km) (Peaje.5,5€. Precio 2014)

 

Recorrido Lineal

Distancia: 5,7Km (ida y vuelta)

Desnivel: 86m



 

La ruta comienza en el parking de la estación de Lekunberri.

Aquí se encuentra la oficina de información, tanto de la "Vía verde del Plazaola", como rutas o lugares de interés cercanos.

Este cartel nos indica la dirección a seguir y las normas de uso de la vía verde.

Nada más terminar el anden de la estación comienza una calle de asfalto que tendremos que seguir.

Llegaremos a este cruce con la carretera NA-1300 que une Lekunberri con Pamplona.
De lejos no se ve muy bien, pero hay una señal al otro lado que nos indica por dónde sigue la ruta.

Una vez al otro lado de la carretera la pista pasa a ser de gravilla.

A lo largo del camino encontraremos alguna que otra sombra.
En días de calor se agradecen mucho.

Aquí no nos pone nada, pero se ve bastante claro que el camino a seguir es el de la izquierda.

Ya estamos al lado del río.

La pena fue no encontrar un lugar por el que Metiés pudiera bajar a darse un chapuzón.

Hay zonas en las que el agua no cubre mucho y pueden verse las rocas del fondo.

Llegamos a la presa de Mugiro.

Este cartel nos indica el final de la vía verde.
A partir de aquí no habrá señales, pero decidimos seguir un poco más

Al poco, en una curva se adivina un túnel.

Decidimos cruzarlo.

Y llegamos hasta aquí.
Este cruce de caminos sin señalizar nos llevó a terminar la ruta.
No queríamos perdernos y con el día de calor que había salido ya teníamos suficiente paseo.

Y vuelta por el túnel.

Poco después de cruzar el túnel encontramos otro que a la ida no habíamos visto.
Nos asomamos porque había mucha corriente de aire, pero no se veía nada.
Supusimos que entre el frío que salía y lo oscuro que estaba debía de ser muy largo.
Sólo apto para aventurerxs con una linterna a mano.

De vuelta en la estación, Metiés decidió investigar a ver si había lagartijas.
Y haber había, pero esta vez no triunfó.