VILLARÍAS
A 1 hora 17 minutos del centro de Bilbao (85 Km)
A 5 m de Villarcayo y a 6 Km de Medina de Pomar
A 5 m de Villarcayo y a 6 Km de Medina de Pomar
Ruta circular:
7.9 Km
2:00h apróx. (esto siempre calculado a unos 6 Km/h, nosotras nunca cumplimos)
50 m desnivel.
La ruta que describo corresponde a la indicada en rojo.
La ruta completa sería con la azul. (Cruza la carretera dos veces).
El camino comienza en la urbanización de Villarías, en la entrada al campo de golf.
En la farola está la primera marca blanca y amarilla que señaliza el comienzo de nuestra ruta.
En la farola está la primera marca blanca y amarilla que señaliza el comienzo de nuestra ruta.
De nuevo otra masca en una farola nos indica el camino.
El paisaje muy típico de esta zona; entre roca y arbustos y árboles de pequeña altura.
Los árboles del fondo nos anuncian la presencia del río.
El primer cruce.
Nuestro camino continúa a la izquierda hacia Villanueva la Lastra.
Aunque no hay pérdida una marca blanca y amarilla nos advierte que vamos bien.
Al pasar por un pequeño charco oímos un ruido, como una piedra al caer.
-¿Qué habrá sido eso? Aquí no hay piedras.
Nos quedamos mirando y vimos las burbujas.
Esperamos un poco, mirando atentamente de donde salían las burbujas...
Y ahí estaba, un minuto después, salía a respirar.
Otro poste en el camino nos indica la dirección a seguir.
Pero, os recomiendo desviaros al puente que indica el cartel.
Desde el puente disfrutamos del paso del río Nela a nuestros pies.
Bajo el puente.
Al final de este pasillo de flores nos encontramos con otro cruce.
Este no estaba señalizado, pero por el plano supusimos que era a la derecha.
Esta parte nos gustó menos. Una larga recta y un poco cuesta arriba.
Tuvimos suerte que el sol no apretase.
Aquí se ve lo que dejábamos a nuestras espaldas.
Y aquí lo que faltaba hasta Villanueva la Lastra.
Al fondo ya veíamos Villanueva la Lastra.
Nuestro camino acabó aquí.
Nos dimos cuenta que iba a ser demasiado.
Metiés estaba lesionado y 8 Km iban a ser muchos.
Al final se quedarían en unos 6 Km.
Tampoco está mal.
Al fondo se podían distinguir las torres de Medina.
Sorprendida con la cantidad de procesionaria.
Un pino que medía medio metro podía llegar a tener hasta tres bolas...
El bosque estaba lleno de nidos ya abandonados pero, prácticamente seco.
Todavía nos queda un buen trecho hasta acabar la interminable recta, ahora cuesta abajo.
Metiés que no entiende que es eso de reposo, se decide a buscar lagartijas.
Al ir no me di cuenta de mirar para atrás en el tramo de roca y me perdí esta vista.
Ya al llegar tomamos un tentempié y descubrimos este invento para limpiarse las botas.
Los golfistas son así de limpios. Así el barro se queda fuera.
La rusta transcurre por una pista ancha y llana entre campos de cultivo.
El paisaje muy típico de esta zona; entre roca y arbustos y árboles de pequeña altura.
Los árboles del fondo nos anuncian la presencia del río.
El primer cruce.
Nuestro camino continúa a la izquierda hacia Villanueva la Lastra.
Aunque no hay pérdida una marca blanca y amarilla nos advierte que vamos bien.
Al pasar por un pequeño charco oímos un ruido, como una piedra al caer.
-¿Qué habrá sido eso? Aquí no hay piedras.
Nos quedamos mirando y vimos las burbujas.
Esperamos un poco, mirando atentamente de donde salían las burbujas...
Y ahí estaba, un minuto después, salía a respirar.
Otro poste en el camino nos indica la dirección a seguir.
Pero, os recomiendo desviaros al puente que indica el cartel.
Desde el puente disfrutamos del paso del río Nela a nuestros pies.
En la otra orilla nos encontramos con otro poste que señalaba otras rutas a seguir.
Quién sabe, igual otro día nos animamos y hacemos alguna.
Bajo el puente.
Regresamos al camino y dejamos las ruinas a nuestra derecha.
Al final de este pasillo de flores nos encontramos con otro cruce.
Este no estaba señalizado, pero por el plano supusimos que era a la derecha.
Esta parte nos gustó menos. Una larga recta y un poco cuesta arriba.
Tuvimos suerte que el sol no apretase.
Aquí se ve lo que dejábamos a nuestras espaldas.
Y aquí lo que faltaba hasta Villanueva la Lastra.
Al fondo ya veíamos Villanueva la Lastra.
Nuestro camino acabó aquí.
Nos dimos cuenta que iba a ser demasiado.
Metiés estaba lesionado y 8 Km iban a ser muchos.
Al final se quedarían en unos 6 Km.
Tampoco está mal.
Al fondo se podían distinguir las torres de Medina.
Sorprendida con la cantidad de procesionaria.
Un pino que medía medio metro podía llegar a tener hasta tres bolas...
El bosque estaba lleno de nidos ya abandonados pero, prácticamente seco.
Todavía nos queda un buen trecho hasta acabar la interminable recta, ahora cuesta abajo.
Metiés que no entiende que es eso de reposo, se decide a buscar lagartijas.
Al ir no me di cuenta de mirar para atrás en el tramo de roca y me perdí esta vista.
Ya al llegar tomamos un tentempié y descubrimos este invento para limpiarse las botas.
Los golfistas son así de limpios. Así el barro se queda fuera.
Esta ruta está bastante bien, tiene verde y es fresca aunque si la hubiéramos hecho un día de sol fuerte...la parte hacia Villanueva de la Lastra durilla eh!!!!
ResponderEliminarLa parte que transcurre cerca de la orilla del Nela fue lo que más nos gustó.
Eliminar